#Coronavirus Charles Leclerc estuvo a cargo de la entrega de alimentos a las personas que más lo necesitan.
(Por Campeones)
El piloto monegasco de Ferrari en Fórmula 1 volvió a poner las manos en el volante, pero esta vez no fue para competir, sino para ayudar a las personas en dificultades en este momento de crisis por la pandemia de coronavirus.
A principios de esta semana, el joven piloto sensación de Ferrari se puso al volante de una camioneta utilitaria de la Cruz Roja Monegasca para hacer su contribución, por iniciativa propia en este difícil momento provocado por la pandemia de coronavirus.
Charles Leclerc, quien también es embajador de la Fundación Princesa Charlene de Mónaco, estuvo a cargo de la entrega de alimentos a personas mayores que no pueden abandonar sus hogares para proveerse de insumos indispensables y ayudó a transportar equipos al hospital Princess Grace, además de distribuir comidas elaboradas, también para los voluntarios de la Cruz Roja.
El gesto del piloto se suma al trabajo de ayuda a Princesa Charlene en la promoción y elaboración de máscaras, junto a sus aportes con las competencias virtuales, que le permiten recaudar fondos para el Fondo para combatir al COVID-19 de la Organización Mundial de la Salud.